martes, 29 de abril de 2014

LA BRISA

Una suave brisa fluye alrededor Con discreto susurro pregunta: ¿Qué fue de tu primer amor? El viento responde: A los volátiles he de preguntar Si alguna brizna de ceniza vieron volar Si algo quedó de su cuerpo Hendiendo por el infinito, ¡Tantos años hace ya! Acecho su respuesta Más ninguno la da Comprendo en el silencio Que ni ceniza queda ya PILAR MORENO

domingo, 27 de abril de 2014

EL NOCTURNO DE CHOPIN

Una perfecta noche de primavera, el firmamento reluciente de las más bellas estrellas, la luna iluminando aquel jardín con su brillante luz, era el lugar perfecto para que Clara y Álvaro paseasen su amor. Habían cenado con las familias, en cuyo acto se había efectuado la petición de mano de Clara y se había fijado la fecha de la boda que se celebraría en un corto espacio de tiempo. Ya se habían retirado todos a sus aposentos, entonces fue cuando Álvaro le pidió a Clara dar un paseo por los jardines del palacete, había pedido al mayordomo con anterioridad, que en el templete que estaba junto a la rosaleda, les pusiese música. El fiel criado, conociendo los gustos del señorito, colocó en el gramófono los nocturnos de Chopin. Sobre todo el número uno que se le había oído escuchar miles de veces. Al llegar al lugar, Clara se quedó extasiada escuchando aquella maravillosa música, tan perfecta y tan bien escogida para la ocasión. Se sentaron los dos en el banco de piedra y mirando hacia el éter, se dijeron las palabras más bellas de amor que hasta ese momento se habían manifestado, jurándose amor eterno. Mientras se arrullaban con esa dulce melodía, Álvaro se atrevió a decir a Clara las mismas palabras que Frederick Chopin había dedicado a Camile Pleyel cuando compuso para ella los tres primeros nocturnos, piezas que verían la luz en 1832 -Cierro los ojos y me dejo llevar por las sendas inescrutables de los sueños de la fantasía del amor. Ningún otro acorde me puede llevar tan lejos, tan alto, tan profundo, ninguna nota tan perfecta, tan intensa, tan especial. La candencia es el cielo raso en una noche de primavera, es fragancia de las flores al nacer, es nada y es el universo-.

viernes, 25 de abril de 2014

MIL BATALLAS

Con aguerrido esfuerzo En esta vida luche Muchas batallas libré Por conseguir un buen amor Con la ilusión ya cumplida Mucho llanto en los ojos Continua congoja en el corazón Por conservar el amor Más… de nada me arrepiento Ese amor fue grande Vacío en algún momento Algún que otro tormento También buenos momentos Pero no valen los lamentos Después de tanto tiempo Más las batallas que perdí Con paciencia y talento Han ganado al adverso En tiempo y movimiento Ya no mira el reloj Ya no pregunta la hora ¿Cuándo volverá la señora? Para que esté todo dispuesto PILAR MORENO

jueves, 17 de abril de 2014

FLAVIANO

Bondad en la mirada Nobleza en el corazón Todo el mundo te quería Buena debía ser la razón Tu palabra empeñaste Delante del altar Mucho sufriste por tu entrega Y la vida te dejaste al final Amigo de tus amigos Trabajador insaciable Esposo sumiso y cariñoso Yerno excepcional Padre adorable Abuelo sin igual Pronto saliste de este mundo Te fuiste sin avisar Tu hija querida Nunca olvidarte podrá Destrozada la dejaste Honda herida difícil de cicatrizar Al padre no se le olvida Nunca, jamás. PILAR MORENO

domingo, 13 de abril de 2014

MANUELA

Adusto semblante el tuyo Pocos amigos en derredor Ceño fruncido Ácido carácter Prepotencia con los demás Rencor a flor de piel Celosa del patrimonio Altiva en el hablar Pensar negativo Esposa posesiva Madre indiferente Abuela singular A los ojos del mundo Un extraño ejemplar PILAR MORENO

sábado, 12 de abril de 2014

AQUEL SALÓN CON SONIDO

Petra se había enamorado de él nada más verlo. Sabía que en ese momento no podía hacer nada pues era domingo y no era él día más apropiado, tenía prisa por llegar a casa, solo había salido a hacer unas comprar de última hora para agasajar a la familia que venía a celebrar el cumpleaños de su esposo. Durante la comida hablaron de muchas cosas entre ellas de lo que a ella le gustaría tener un reloj de pared en su salón, era muy amplio y cuando no había nadie, era muy silencioso. Había diferentes opiniones, a unos les gustaba colgado, a otros de pie, otros decían que de consola era muy elegante, cada uno expresaba lo que sentía e incluso en algunos de los parientes llegó a ver entre líneas como si se estuviesen mofando un poco de ella. No entendía por qué pues no era ningún capricho extraño, en muchas casas aún sin ser de alto standing los había. Podría ser incluso una compañía para cuando Adolfo su esposo estaba de viaje, el sonido del tic-tac parecería que allí tenía su corazón latiendo y cada vez que sonasen las horas, sabría que quedaba una menos para su regreso. Adolfo no dijo nada al respecto, parecía no dar importancia a lo que Petra estaba comentando, lo tomó como un comentario más de las cosas que le gustaría tener, pero de las que luego se olvidaba y no volvía a mencionar. El lunes cuando su marido se fue de viaje, Petra se fue corriendo a la relojería, entró y pidió al dependiente le mostrase ese reloj que había colgado en el escaparate y que nunca antes había visto allí expuesto. El muchacho así lo hizo, le mostró el reloj, dijo el precio y Petra lo aceptó pagándolo en el acto. Lo único que debía de hacer el empleado era llevárselo a casa y colgarlo en la pared que ella había escogido. ¡Qué bonito era! estaba encantada, se pasó toda la semana mirándolo, pues cada vez le hacía más gracia el ver salir al pajarito cuando daba los cuartos y al dar las horas unos diminutos bailarines danzaban tocando con sus trompetas una alegre melodía. Cuando Adolfo regresó el viernes por la tarde, ella no le dijo nada de su adquisición, pero al rato de estar en casa le preguntó ¿Qué es ese pájaro que suena en el salón? Entonces ella emocionada le preguntó, ¿te gusta, a que es bonito el sonido? ¿No habrás traído un animal a casa, sabes que no lo soporto? No cariño, no es de verdad, ven y lo verás. ¿Pero… que has hecho? Era cierto que querías un reloj de pared, con lo que sabes que me molestan los ruidos. Bueno pero este es diferente, espera a que de la hora y verás que belleza, que elegancia, en los cuartos es un poco soso el pajarito, pero en las horas ya verás, ya verás. De pronto, mientras Petra trataba de convencerlo, dio la hora en punto y Adolfo sin más le dijo: Ya puedes descolgar ese trasto y que yo no lo oiga, me ponen de los nervios estos aparatos, encima con esa estridente música, no quiero verlo más. Pues no pienso hacerlo, es la ilusión de mi vida tener uno desde que era jovencita y al fin lo he conseguido. Dio media vuelta y se fue a la cocina a preparar la cena. Cuando tocó la siguiente hora, Petra escuchó un tremendo ruido en el salón, fue corriendo y cuál fue su sorpresa al ver que Adolfo, había tirado una de sus botas contra el reloj. Pero… ¿Qué has hecho? mi reloj, ay mi reloj. Adolfo entonces contestó muy seriamente, pues ya lo ves querida he salido de caza y he matado un pájaro y de paso a la orquesta para que no toquen en su funeral. PILAR MORENO

lunes, 7 de abril de 2014

EL BAÚL

Como si de un baúl se tratase, Rebusco en el interior del corazón Hago aflorar lo que en su fondo se percibe Lo que ya no sirve, a un lado aparto, Sigo escudriñando, más… ¿Habrá algo que merezca la pena? Malos ratos, sinsabores, penas Con ahínco me entrego en la indagación Llegaré a encontrar alegrías plenas Algunas hallo, ya viejas Otras en cambio, mucho más nuevas He de dejarlas arriba Para que todo el mundo las admire Son muy tiernas ahora Habrá que dejar que crezcan Que cuaje la savia nueva Y en sus corazones Nunca asome la tristeza. PILAR MORENO

domingo, 6 de abril de 2014

LA LLUVIA

Triste día de otoño Golpean cristales Inclementes gotas de lluvia Miro la calle sin ver Lágrimas en los ojos La vista se nubla Ácidos pensamientos El alma se retrae Un miedo profundo Atenaza mi cuerpo Se acerca un final temprano Vil silencioso y sin esperanza La soledad cercana Anuncia su dominio PILAR MORENO

sábado, 5 de abril de 2014

SI VOLVIERAS

Si volvieran a mirarme esos ojos Si pudiera escuchar esa inigualable sonrisa Si tus manos se volvieran a posar en las mías Si pudiera recibir aquellas caricias Que distinta sería la vida Que gozo habría en nuestras almas Que fácil sería vivir Ahora sin ti muero de desesperanza PILAR MORENO